¿Te ha pasado que sientes que todo lo tienes?
Sentir que estás en el mejor momento de tu vida, crees tenerlo todo y sentirte plena, creer que todos los aspectos importantes de tu vida no podrían estar mejor, todo está tan bien y nada podría salir mal.
Llegó al matrimonio con grandes expectativas y con la emoción de vivir una nueva etapa en mi vida. Solo pensaba en todo lo que venía para nuestro hogar, los planes que comenzamos a hacer juntos; llegamos cada uno con los modelos construidos a través del tiempo y de la crianza recibida y .. Bummm!!! Comenzó nuestra vida de casados jajaja.
Creo que al igual que yo, él tenía sus propias expectativas con respecto a los distintos aspectos de nuestra vida en pareja, tanto él como yo teníamos diseños que la sociedad había construido con respecto a la mujer, al hombre, la pareja, el matrimonio en general y por supuesto a las finanzas en pareja.
¿Hablamos de finanzas antes de casarnos?
Hablamos de planes, del lugar donde queríamos vivir, pero finanzas nunca. Cada uno de nosotros teníamos mentalidades, ideas, creencias y argumentos financieros que se habían alimentado en el núcleo de nuestras familias nos encontrábamos juntos y viviendolas de la misma manera.
- Creencias con respecto al dinero
- Creencias con respecto al manejo del dinero
- Mentalidad de abundancia o escasez
- Creencias con respecto a las tarjetas de crédito
- Mentalidad de consumismo
- Creencias sobre las decisiones financieras en pareja
El manejo de las finanzas en pareja no fue por decisión fue por posición, lo digo porque mi esposo contaba con sus estudios
profesionales de finanzas que lo hacían a él la mejor opción para manejar las finanzas familiares… y bueno en realidad yo creía que no contaba con las habilidades para asumir tal responsabilidad.
Nosotros somos buena vida, trabajamos para vivir bien..
Yo estuve desentendida y la realidad era que tocar todo tema financiero en nuestro matrimonio por esa época era nulo.
Confiaba en mi esposo asi que por mi parte me encargué de disfrutar sin pensar en nada más jajajajaja nunca intenté cuestionar o preguntar, solo pensaba que si se hacía era porque se puede.
Visión en pareja.
Si hablamos de visión… No la encontramos por ningún lado, desde el principio nos fuimos encaminando hacia el día a día y los afanes que se presentaban no recuerdo haber tenido alguna conversación con respecto a los sueños o planes futuros y mucho menos pensar en cómo nos veíamos en 5 años o en 10 años. Claramente se cumple lo que dice la Biblia.
«Donde no hay visión, el pueblo se desenfrena.»
Proverbios 29:18 NBLA
Los excesos, las compras y los gastos desmedidos fueron volviéndose poco a poco tan normales e imperceptibles para nosotros, cultivamos en el día a día los malos hábitos alimenticios, una pésima administración del dinero y lo peor acumulando deudas, préstamos y más responsabilidades financieras.
Una vida de comodidades y lujos en todos los aspectos; viajes, ropa, restaurantes… queremos «lo mejor para todos». ¿Qué más podíamos pedir? Tal vez tener lo que en mi vida no había tenido y disfrutarlo era la decisión que yo había tomado.
Desde que nos casamos mi esposo manejaba las finanzas, este hombre 100% financiero… ¿ que podría salir mal? Si me preguntan el papel que decidí tener financieramente era disfrutar sin preguntar jajajajaja. Que la responsabilidad la tenga quien sabe de este tema, pensaba yo.
Cuando me tomó el tiempo de analizar toda la parte cultural, podemos encontrar que no solo en Colombia como nación sino en Latinoamérica vemos claramente una creencia frente al dinero, un desinterés, falta de importancia y al final delegar la responsabilidad y no asumir lo que nos corresponde en nuestra vida financiera. Ya está… yo me encontraba en la estadística.
¿De quienes nos rodeamos?
Cuando tu vida muestra una aparente “prosperidad” comienzas a entrar en ese círculo de personas que te miden por esas apariencias, conversaciones constantes acerca del nuevo auto, el lanzamiento del nuevo Iphone, la nueva línea de computadores o accesorios de una marca famosa. Tus prendas de vestir que dan de qué hablar, el bolso, las botas o el lugar donde fuiste de vacaciones el último semestre.
Hablar de cosas sin importancia real y terminas creyendo que resulta obligación mantener un estilo de vida y no mostrar signos de desmejora; es esa necesidad que tenemos todos de ser aprobados.
Nosotros en medio de todo estábamos en el proceso de descubrimiento, acoplamiento y aprendizaje con nuestro escaso conocimiento. Pero eso sí conscientes de la decisión que habíamos tomado de caminar juntos de la mano, dispuestos a aprender y superar cada situación difícil que podía presentarse durante esta nueva etapa en nuestras vidas el matrimonio.
Escribir me gusta, pero escribir de una manera transparente y real aun más porque sabemos que en el área de finanzas en pareja podemos identificarnos con la realidad que se vive hoy en día en muchas parejas, llevar un mensaje que nos pueda llevar a tomar decisiones pensando en un futuro juntos, poder formar unas buenas bases para nuestra vida en pareja, nuestra familia y cuando llegue nuestros hijos.
Es imposible si nos disponemos a transformarnos como pareja y como matrimonio.
Te invito a descargar en el siguiente enlace una herramienta espectacular y que puedas comenzar a dar pasos hacia una salud financiera.
Un abrazo muy grande de mi parte y mi esposo.
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